Kai Shing afirma haber recibido más pruebas de torturas por parte del Ejército indonesio a indígenas como el de la grabación, realizada en el área de Tingginambut, al este de Papúa. A través de un comunicado, la Comisión asegura desconocer el paradero de los torturados, aunque según la cadena estadounidense NBC, el cuerpo de uno de ellos fue hallado a finales de 2009 al lado de un río.
Indonesia firmó en 1998 el tratado contra la tortura de las Naciones Unidas, pero que "los actos de tortura continúan" con "impunidad". Además, se denuncia la "inmunidad" de los soldados indonesios, que "no pueden ser juzgados por un jurado civil".
La Comisión denuncia que el ejército indonesio realiza de manera regular operaciones en las que se "queman poblados, matan el ganado y arrestan e intimidan allí donde sospechan que se encuentran los separatistas".
En el vídeo obtenido por la Comisión, se puede observar cómo varios soldados interrogan a los indígenas con métodos violentos. Primero con patadas en la cabeza y en la espalda; después amenazándoles con un cuchillo en la garganta, la nariz y los ojos; más tarde quemándoles los genitales, una escena que la Comisión ha eliminado de la grabación
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