Tengo muy claro que ninguna acción buena se pierde en este mundo. En algún lugar quedará para siempre - Vicente Ferrer.

jueves, 11 de septiembre de 2008

Sin plaza en el colegio por ser hijas de lesbianas


Julia y María sufrieron en sus carnes el pasado 18 de julio un caso de discriminación por ser lesbianas. Querían escolarizar a sus hijas en el colegio privado San Estanislao de Kostka (SEK) Madrid; desde el centro ya les habían dicho que había plazas disponibles para las niñas, pero cuando se enteraron de que eran lesbianas les comunicaron que ya no había sitio para ellas.

El colegio tiene 7.000 alumnos y seis centros en España, así como una universidad privada, la Camilo José Cela

Estas dos mujeres tuvieron a sus hijas por inseminación artificial. Son mellizas y tienen dos años. Un mes antes de dar a luz formaron matrimonio y cuando las niñas nacieron, les bautizaron. Nunca habían tenido ningún problema, hasta que se cruzaron con la psicóloga del colegio y se dieron de bruces con la homofobia.

Se habían asegurado en varias ocasiones de que había plazas libres. De hecho, cuando les negaron la escolarización poniendo como excusa la falta de sitio, convencieron a un amigo para que llamara y preguntara por la disponibilidad. A él le dijeron que sí había.

"Aquel día nos quedamos calladas y paralizadas. Nunca habíamos sufrido una discriminación así. Nos sentimos tratadas como si fuéramos estúpidas"


2 comentarios:

Marta Nieves Montero González dijo...

¡¡Es realmente repugnante, injusto y avergonzante que puedan suceder cosas como esta!!

Siento verguenza ajena. Esas dos criaturas se merecen el mismo trato y atención que cualquier otro niño en sus mismas circunstancias.

¡Me ha conmocionado mucho y me duele que puedan dañar a unas niñas, por formulismos estúpidos, ideas retrógadas o visiones totalmente "ciegas" de la sociedad en que vivimos!

Disculpad mi lenguaje, pero estoy realmente indignada.

Es posible que todo esto tenga una razón más profunda. Tal vez, ese centro no se merecía tener a esas dos maravillosas pequeñas y quizás sean más felices en otro.

Aún así, sus madres deberían denunciar el trato desigual e injusto por el que han tenido que pasar sus niñas en el organismo correspondiente.

¡Ánimo chicas, conseguiréis lo mejor para vuestras niñas!

Os mando toda mi energía y mis mejores pensamientos positivos.

¡Luchad por vuestros derechos! ¡Sed felices!

Besitos para las cuatro,

Vesta, desde mi corazón.

Marta Nieves Montero González dijo...

Discúlpame Koldo, sólo quería manifestarte mi agradecimiento por haberme dado la oportunidad de conocer esta noticia y poder opinar sobre ella.


Gracias por darla a conocer.

¡Sé feliz, mi niño!

Vesta, desde mi corazón.

P.D.: mi enhorabuena por tu magnífico blog.